18 de octubre de 2015

Otoño precario y caliente.

HOJAS EN EL OTOÑO

Suena el pistoletazo de salida para esta campaña y vamos a por todas. Nosotras las jóvenes precarias no queremos aceptar algo que nos pesa en el pecho, algo que nos baja el estómago y nos da jaquecas. No queremos asumir falsas promesas, no queremos una juventud disfrazada de formación, cuando todas sabemos que debajo se esconde trabajo. No queremos firmar los chistes que son las becas de formación, las prácticas, las oportunidades. Queremos firmar contratos que nos digan esta será tu formación y este el trabajo a realizar. No queremos la bondad de la jefa, hoy descanso de diez minutos, mañana sin descanso y pasado uno de 5 minutos. No queremos trabajo por objetivos con salario constante. Y no queremos que llegue ese momento cada año nos caemos del puesto. Nos caemos y nos amontonamos en el paro, ya maduras. No queremos ser hojas en el otoño.

La precariedad se define como la situación laboral intermitente, como falta de derechos en el trabajo, como inestabilidad vital, como prácticas que esconden trabajo, en claro fraude legal. La precariedad rompe la comunidad. La precariedad es una estrategia cortoplacista que lleva a las comunidades a enfermar. Y esto lo queremos rechazar. Y vamos a por todas. A por todas las barreras para construir una comunidad sana, a por todas las personas responsables de nuestra situación, a por todas las argumentaciones cínicas y a por todas las razones para la apatía.


En esta campaña pedimos a todas las compañeras universitarias que reflexionen y actúen. Que no acepten ser hojas, que no se conformen con la caída y el suelo. Sabemos que no te formas, trabajas. Acércate, conócenos y conócete, conoce tu situación y cómo solucionarla. PONTE LAS ZAPATILLAS QUE ESTO HA EMPEZADO  

(Este comunicado está escrito en femenino inclusivo, creemos en el lenguaje como vehículo símbolos y creemos positivo emplearlo de esta manera para subrayar la situación de invisibilidad de las mujeres y su consecuente facilidad para mantenerse en la precariedad)

https://www.facebook.com/Oto%C3%B1o-Precario-Y-Caliente-608939662581193/



12 de octubre de 2015

Nada que celebrar

Porque, como decía Galeano, en 1492 las nativas descubrieron que eran indias, que vivían en América.
Descubrieron que estaban desnudas, que existía el pecado, que debían obediencia a un rey y a una reina de otro mundo y a un dios de otro cielo. Que ese dios había inventado la culpa y el vestido. Y había mandado que fuera quemada viva quien adoraba al sol y a la luna.
Y a la tierra.
Y a la lluvia que la moja.
Porque NO HAY NADA QUE CELEBRAR si no es su lucha y su resistencia.
Porque no alabamos, ni conmemoramos, ni elogiamos orgullosas una civilización construida gracias a la destrucción de pueblos y culturas diferentes. Lo rechazamos. Rechazamos el imperialismo de ayer y de hoy.
Hagamos que el día de hoy no sea de orgullo, sino de vergüenza.
PORQUE AMÉRICA NO FUE DESCUBIERTA, SINO INVADIDA Y SAQUEADA.

4 de octubre de 2015

Comunicado No+BecasxTrabajo UC3M

A TODAS LAS ESTUDIANTES.

Una beca no es un trabajo, pero parece un trabajo. La mayoría de las empresas funcionan
gracias a nosotras, las becarias, y a la cobertura legal que les han dado los gobiernos que
se materializa en unos contratos de prácticas donde no existe relación laboral y con la falsa
promesa de un contrato que nunca llega. Pero mientras, cubrimos puestos de trabajo a
precio de coste, sin derechos laborales y los pocos derechos formativos que tenemos no se
suelen cumplir. Estamos en todas partes, detrás de la cámara o de la redacción del
periódico, en los bufetes de abogadas, en proyectos de investigación o arreglando
programas informáticos.

Pero también nuestra universidad, como las empresas, se sostiene hoy gracias a las
trabajadoras y a las que parecen trabajadoras, pero no lo son. En el mostrador de la
biblioteca, en el punto de información, en el rectorado, en el aula de idiomas e incluso allí
donde deben organizar las becas, en todos lados hay becarias.

Camufladas en un contrato de formación, somos muchas veces la pieza más aburrida de un
engranaje donde somos pasajeras y desconocidas; somos con suerte compensadas con el
salario mínimo, con mejorar nuestro currículo o con promesas de trabajos que ya no existen
porque los sustituye una beca.

Nosotras, la plataforma de No+BecasxTrabajo (UC3M), hemos decidido organizarnos y
hacer oír nuestra voz en unos contratos que no contaron con nosotras y hacer reales unos
derechos que muchas veces no conocemos y otras muchas ni siquiera existen.

Por ello, exigimos: planes de estudio que concilien beca, estudios y la propia vida;
cotización obligatoria en la seguridad social; derecho a una formación real; acabar con la
sustitución de trabajos por becas; limitar el número de becarias en empresa al 5% de la
plantilla y hacer obligatorio un salario económico que compense el tiempo invertido a las
becadas.

Nos ponemos en marcha y preparamos ya una reunión el 5 de octubre con la vicerrectora
de estudiantes para concretar estas reivindicaciones en la UC3M.

Animamos a todas las becarias de la UC3M que estén en prácticas tanto internas como
externas a contactar con nosotras y contarnos su situación, a proponer cambios en la
normativa vigente de las prácticas o para resolver cualquier duda que tengáis.

Por último recordar que este mensaje va dirigido a todas las estudiantes y no solo a las
becadas actualmente, ya que tarde o temprano nos tenemos que enfrentar con el mundo
laboral y nuestra primera oportunidad suele ser como becada o con un contrato en prácticas
que muchas veces son de dudosa legalidad.

No+BecasxTrabajo: http://www.nomasbecasportrabajo.org
A.U. Carlos Marx: carlosmarxuc3m.org
Colectivo Rise Up: rise.up.uc3m@gmail.com

1 de octubre de 2015

¿Por qué dar fuerzas al movimiento estudiantil?

"Por qué debería trabajar en el movimiento" es una pregunta habitual tanto dentro como fuera. Es una pregunta aplicable a todo aquello que existe en nuestras cabezas es capaz de mover el mundo. En el movimiento estudiantil, es normal que sus muchos militantes la respondan con razones de responsabilidad. Uno viene aquí porque es lo que debe, por sus necesidades, por defenderse, por su clase, por una obligación moral con sus compañeras y compañeros en lucha y por merecer las conquistas que hemos ganado. Estas son razones importantes, pero hay una detrás de todas ellas más poderosa.

Doy mi fuerza porque es hermoso crear. Doy mi fuerza porque de nuestras conciencias salen los nuevos mundos que llevamos dentro, que pueden curar los errores de este y que pueden hacer nuestro el futuro. Además de defenderse de los abusos de los poderosos, o de cumplir una responsabilidad que tenemos con la comunidad en la que vivimos, nuestras fuerzas sirven para dar vida a nuevas ideas que hagan, de una voluntad, una realidad.

Para mover el mundo, y para atrancarlo, la herramienta que usamos desde que nos diferenciamos del resto de animales es la capacidad de imaginar cosas en común. Ninguna otra especie podría creer toda ella en la existencia de cosas como "Inglaterra", "2 millones de euros" o la "Organización de las Naciones Unidas"; y sin embargo nosotros somos capaces de verlas, someternos a ellas, dominarlas o intentar cambiarlas. Para mover el mundo solo esas imaginaciones comunes son capaces de unir nuestras fuerzas en pos de algo que deseamos que cambie. Hay que imaginar con fuerza otras ideas para hacerlas reales, hay que imaginar nuevas estructuras para las ideas que cambian el mundo si ya no funcionan. Ahí también está la belleza de crear, que todo se puede crear, recrear y poner a trabajar a nuestro servicio.

Para hacer real la democracia el pueblo debe asumir el poder. Para esto no sirve que los gobiernos (que nosotros mismos imaginamos entre todos) nos concedan elegirles pasando unos años. Asumir el poder quiere decir que, con gobierno o sin el, es el pueblo quien debe decidir lo que ocurre y es el pueblo quien debe lanzarse a crear nuevas ideas y nuevos movimientos que aseguren que su voluntad es poder.

El movimiento estudiantil es la expresión de nuestra comunidad por cambiar las cosas. Para cambiar la universidad, para detener los avances de la injusticia, para que la educación sea un derecho y nos haga más humanos, para encontrarnos todas y todos en un espacio común y para hacer de nuestra voluntad una parte de la realidad. Por eso doy mi fuerza al movimiento y por eso pido a todo aquel que viva conmigo que dé la suya. Por la democracia, por el futuro que podamos alcanzar y por lo hermoso que resulta crear.

Le repito, a nosotros no nos dan miedo las ruinas, porque llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones. Ese mundo está creciendo en este instante. 
- Buenaventura Durruti